Algunos pensarán ¡al fin!
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Ventanas funcionando en un manejador de ventanas que no es Windows |
Pues sí. Como todo lo bueno se ha hecho esperar pero al fin ha llegado. Nuestro primer interfaz gráfico.
Estoy convencido que es en este aspecto, aparte de la exoticidad de poder ejecutar las aplicaciones en cualquier entorno sin necesitar de un cambio ni de volver a compilar la aplicación siquiera, en el que es verdaderamente fuerte Java. En mi modesta opinión es el mejor lenguaje para construir interfaces gráficos.
Java es un lenguaje desarrollado desde el principio siendo un lenguaje orientado a objetos, por lo que no ha necesitado de añadidos para adaptarse a esta evolución y eso se nota.
Ha abandonado conceptos complicados de la herencia, como la herencia múltiple, sustituyéndolos por conceptos más sencillos, como los Interface (que aún no hemos visto y que tampoco vamos a ver en esta lección) que ofrecen una versatilidad a los objetos impresionante.
Pues con la misma filosofía ha abordado Java la implementación del manejo de las ventanas gráficas: manteniéndose en la sencillez, de la que tan alejada se encuentran lenguajes como el C++ sobre todo en la implementación de Windows, pero permitiendo la versatilidad, el sentir que podemos hacer lo que deseemos con las clases de Java.
Sumando a esta sencillez se encuentra el IDE que estamos manejando, que nos facilita las cosas cuando se trata de ir colocando todos los controles con la mayor sencillez posible pero mostrándonos el código con el que lo hace, lo que nos permite aprender y emplearlo para automatizar la colocación de, por ejemplo, un conjunto enorme de controles del mismo tipo programáticamente.
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Termómetro de ventana. ¿Alguien coge el doble sentido? |
Finalmente hacer ver que aunque la lección sea la más larga en cuanto a la cantidad de páginas no es por su complejidad sino por una, quizás exagerada, obsesión por mi parte de que nadie se pierda en ningún paso de estos primeros con los controles y formularios y por eso hay una profusión tan grande de imágenes muchas de ellas, seguramente, superfluas. Pero prefiero que muchos pienses que sobran explicaciones a que uno se pierda en estos primeros pasos en lo que, considero, es la parte más agradecida del mundo de la programación donde con muy poco esfuerzo se consiguen vistosos resultados.
En cuanto lo que es el nivel de dificultad del ejercicio presentado ha bajado con respecto al de las anteriores lecciones. La idea es que la sencillez del problema a resolver nos centre en el punto de interés de esta lección: presentar los fundamentos de la programación de aplicaciones orientadas a formularios.
Vamos a realizar una pequeña utilidad para convertir temperaturas entre dos escalas, la Celsius y la Farenheit.